jueves, junio 21, 2007

Leiden, Holanda, 2007

Holanda es un país práctico e inteligente. Me esperaba algo bueno y me he encontrado algo aún mejor. El ambiente en la calle es excepcional,con una mezcla de razas y culturas por la que valdría la pena no moverse de una esquina durante horas para sólo observar. Se respira un aire de libertad que limpia los pulmones del paternalismo europeo que cada día nos dice hacia dónde debemos dirigirnos. La marihuana es legal, así como la prostitución, y esto último lo sabe un gran porcentaje de la gente. Sin embargo en este país de escasas prohibiciones, que otras naciones califican de vergonzoso, ¿dónde están los holandeses depravados que se pasan todo el día fumando y disfrutando de las asistentes sociales que se insinuan en el Barrio Rojo?. Es curioso comprobar como los coffee shops y el propio barrio encarnado están plagados de españoles, británicos, alemanes, italianos y franceses, pero qué casualidad que los inmorales de los holandeses no aparecen por allí. Es curioso comprobar que las prohibiciones no consiguen nada más que el enriquecimiento de ciertos personajes de nula reputación, a costa de vender todos esos productos malos que el Estado nos prohíbe, prostitutas incluidas, que sin duda al ser aquí ilegales, no existen y por tanto semos europeos, limpios y aseados. Es curioso que sean éstas señoritas las de dudosa reputación y no los gobernantes que hacen y deshacen con completa impunidad y cada cuatro años nos dejan elegir. Bravo por los Países Bajos, un ejemplo a seguir, siempre que la derecha no termine de resurgir cómo parece que está ocurriendo...

8 comentarios:

Arual dijo...

Qué envidias xddd!! No paras de viajar, joooo, bueno bueno, venirme a tu blog es como viajar desde casa, jeje, porque hasta agosto no tengo vacaciones, ni oportunidad de echarme un viajecillo.
Holanda no la conozco, todo se andará, pero estoy contigo en que las prohibiciones para nada son buenas, al contrario se incentiva el consumo de lo prohibido y se favorece a las mafias, pero bueno creo que en nuestra España estamos a años luz de los Paises Bajos...
Saludos!!!

Akroon dijo...

Pese a no haber estado en Holanda, te doy toda la razón.

Este tipo de prohibiciones que 'sufrimos' tienen su origen (a mi entender) en moralismos de origen religiosos, que básicamente prenteden el control sobre la persona a través de infundir miedos.

Cuando algo es prohibido, más ganas tienes de hacerlo, de probarlo, de cruzar la línea... sin embargo, cuando se incluye en la vida bajo el prisma de la normalidad adquiere el peso y la importancia que verdaderamente tiene.

Me estoy poniendo filosófica, y yo soy de jiji jaja juju y soltar tacos... ay ay ayyyyy... ¿será que en el fondo tengo algo de coquito? Vete a saber!

Un placer pasarme para ver tus fotos, como siempre!

Besazos libres de prohibiciones estúpidas!

Akroon dijo...

Fe de erratas: religiosos, sin la S, o sea religioso... que me he colao.
:P

(que por cierto, esto de las erratas, qué bichejos más asquerosos, no? jeejje).

Gonzalo dijo...

Las prohibiciones son necesarias para el correcto funcionamiento de la sociedad.
El semáforo en rojo prohíbe cruzarlo, y respetar esa prohibición es positiva.
Por lo tanto creo que es importante diferenciar entre prohibiciones buenas y prohibiciones malas.
Prohibir lo malo es sensato. Aunque de su prohibición se derive efectivamente la perniciosidad y enriquecimiento de gentes sin escrúpulos.
La prostitución, por no estar prohibida, no deja de ser algo malo.
Aunque entiendo que en un mundo ideal las prohibiciones serían innecesarias porque todos actuariamos de forma correcta. Pero me temo que eso no es posible.
Sólo una opinión.

Gonzalo dijo...

P.D: por cierto, pedazo de foto; que con tanta reflexión tonta se me olvida lo fundamental.
Una vez más muchas gracias por hacernos viajar.

Roi dijo...

Arual: La verdad es que este año me estoy pasando... entre los viajes del curro y los de ocio me paso la vida en la T4, que no me quejo... pero que no es lo normal, o al menos no lo era... De todas formas lo que digo siempre, si en algo no me importa "tirar" el dinero es viajando.

Akroons: ¿Tendré que empezar a llamarte "alma gemela"? ¿Acaso buceas por mi cerebro para escribir las mismas frases que estoy pensando? De ser así... ¿tendré yo también algo de coquito? ¿te gusta también el coco? ¿vendrá el coco y nos comerá, duermete niña, duermete ya... Fe de erratas: Akroon sin S que me he akronlao.

Gonzalo: Pues evidentemente aquí no coincidimos, pero soy consciente de que mi mundo utópico de prohibido prohibir es, no sólo difícil de entender sino, difícil de llevar a cabo. Ahora que Holanda sigue siendo un ejemplo para demostrar que la prohibición no evita que se hagan las cosas llamadas "malas", que estas se siguen haciendo en todos aquellos países donde sí estan prohibidas, e incluso más y peor. Por ejemplo: la tenencia de marihuana en España es ilegal. ¿Por qué me vuelvo con olor a hachís del concierto de los Rolling? ¿Por qué se prohibe y luego se mira para otro lado? Saludos y a seguir en nuestra guerra en la puerta, este domingo me vuelve a tocar...

A todos: Próximo destino: Si sale, Nueva York.

Arual dijo...

Jeje!! Yo también opino que nunca tiro el dinero viajando, me encanta viajar!!!
Besos!!

Akroon dijo...

Jurjurjur... Buceo por las mentes ajenas porque soy una especie de David Copperfield en niña y sin laca.

Será que tienes coquito también (qué cosas, no???).

Y sí, me gusta el coco, pero del que se come y el de barrio sésamo.

El coco del miedo que viene y se te come, se llama Ratzinger, pero yo no le tengo miedo... :P Me da risa, eso sí.

Besos con olor a coco (del que se come, se entiende... jejeje).