Aunque podría corresponder a cualquier lugar de España, así cae la tarde en la playa de Kómmos, en una región de pescadores que en nuestro idioma suena un poco agresivo. Buscábamos tranquilidad al sur de Creta, pero nos encontramos un lugar totalmente turístico y poco recomendable para viajeros independientes. Lo más interesante son los acantilados de arenisca situados alrededor de la playa, que sirvieron de tumbas en la época romana, de vivienda para los primeros cristianos, de refugio para algunos pastores y finalmente de encuentro pacífico para los hippies de los 60. Supongo que en breve se convertirán en viviendas baratas con hipotecas sencillas a sólo 20 años. Yo, por si acaso, eché mi solicitud... a ver si me toca...
1 comentario:
Komnos, suena con personalidad, y la foto parece que la tiene.
Publicar un comentario